...TAN CRUELMENTE DENTRO DE TI...

...Estos días que he acompañado a mi padre en el hospital he visto algo que no puedo olvidar...
No se cual es su nombre...ni nada de su historia...solo que era una mujer como podía ser otra...sin más...
Pero ella era distinta...Compartía habitación con una mujer muy mayor y una mañana lloraba y lloraba sin parar...Su imagen contaba a gritos su enfermedad...
Ni un gramo de grasa y nada entre sus huesos y su piel...
Duro...muy duro ver esto para mi...pero mucho más duro aún verla caminar a toda velocidad por el pasillo que une las dos alas del hospital nerviosa...agitada...y que nadie se diera cuenta de que lo hacía para desgastar lo poco que la pudieran estar dando para tratarla de nutrir...
Duro verla entrar de la puerta de acceso a la escalera de incendios enrollando algo en un pañuelo de papel y que nadie lo viera ni hiciera nada...
Duro verla siempre sola sin nadie acompañándola en su habitación...
Duro sentir que nadie fuera consciente de que estaban perdiendo un tiempo precioso con ella...que no era sitio para tratarla...que debería estar en un hospital con una unidad especializada y no en una planta de medicina general...sin vigilancia...sin personal especializado...sin asistencia psicológica de apoyo...
Duro...muy duro que nadie haga apenas nada y pueda morir...
Lo reconozco...no soy una mujer delgada...tengo tendencia a la redondez y eso para mi durante un tiempo fue un infierno...Era la mas redondita de mis hermanas...de mis amigas y del mundo entero también...me parecía a mi...
Me odiaba por comerme un pedacito de pan y vomitaba después...
Me dañé algunas piezas dentales seriamente...estaba nerviosa...no me quería ni era feliz...
Lo superé con 17 años fueron solo unos meses...adelgacé y en teoría me curé...pero a los 32 años volvió...Pesaba más de 100 kilos y en dos meses perdí más de 20...una barbaridad...Un maltrato continuo a mi misma...
Fue mi hijo el que me salvó con poco más de seis años...
Salí del baño con los ojos hinchados de vomitar y el corazón latiendo a mil por el esfuerzo de intentar sacar al máximo lo que había dentro de mi y me dijo...
-¿Que te pasa...?...Por favor no llores …yo quiero que estés bien...-
Él no lo sabe y quizá no lo recuerde...Ojala... pero algún día se lo contaré...
El fue quien hizo que tomara conciencia para no volver jamás ahí...para salir de ese infierno a tiempo...para que no me dejara poco a poco destruir...
Ahora soy una mujer con curvas…pero llena por dentro y sobre todo infinitamente más feliz…
Gracias Alvaro...por hacer aquel día tanto por mi...
Y a ti pequeña mujercita desconocida...te deseo con toda mi alma que tengas coraje…que asumas que estás enferma…que puedas salir de donde estás metida y que alguien haga rápidamente algo inteligente por ti...
La vida es demasiado hermosa para desaprovecharla así y tú deberías estar con una sonrisa enorme paseando por la calle y no encerrada tan cruelmente dentro de ti…